Todo ser humano, cualquiera sea la actividad  que desempeñe, debe comprender que su vida  se rige por pautas impuestas por la cultura de la sociedad y por principios de valor universal. Es decir, por las ideas, creencias, valores, prescripciones y prohibiciones que hacen  a los criterios morales de la sociedad en la cual la persona se desenvuelve.

El ser humano es inteligente y libre. Por consiguiente, posee la obligación moral de cumplir con su deber; pues, a pesar de su libertad, su conducta aparece condicionada por múltiples circunstancias y elementos tanto internos como externos: hábitos, temperamento, carácter, influencias culturales, sociales, económicas, ambientales y otros.

Muchas veces, profesión, negocio y ética colisionan con conceptos como la competitividad, la búsqueda del lucro y el éxito profesional. 

Sin embargo, la ética es uno de los factores fundamentales de protección y creación de los valores en  las organizaciones y, en consecuencia, uno de los pilares que las sustentan. Todo éxito debe tener un fuerte sentido del bien común y de la transparencia, con  una plataforma ética  que lo apoye.

La asignatura es importante porque ayudará a comprender que la actividad profesional y la conducta personal están regidas por normas éticas y que el medio para perfeccionar las actitudes y el comportamiento radica en practicar una serie de virtudes para el logro de una vida plena.

 

Los pensamientos siguientes sintetizan el ideal de conducta de todo ser humano:

 

  • Vigila tus pensamientos, pues se convertirán en tus palabras.
  • Vigila tus palabras, pues se transformarán en tus acciones.
  • Vigila tus acciones ya que se vuelven un hábito.
  • Vigila tus hábitos porque conforman tu carácter.
  • Vigila tu carácter porque se convierte en tu destino.